Virgilio Piñera, 1912-2012
Uno de los cansados ritos que impone la tradición es la conmemoración de un centenario: ya sea éste el natalicio de un escritor o la celebración de una fecha. Pero más allá de la marca temporal que apenas lo ilumina para desaparecer, la obra del escritor perdura en la memoria de los lectores construyendo su identidad civil frente a la imaginaria épica colectiva de la Historia. La única geografía que el escritor conoce, aquél que escribe y se escribe, es la libertad.